Así nacieron los molinos de grano de Salzburgo
Hoy te contamos la historia de los molinos de grano de Salzburgo y de Johann Thurner:
Hoy en día, la agonía de la elección para encontrar exactamente el molino de grano adecuado es incomparablemente más difícil que hace 35 años. En la década de 1970 se podían contar los modelos disponibles y, sobre todo, los pioneros que construyeron molinos harineros para el hogar, por un lado: ¡Johann Thurner estaba allí!
Él nació en 1951 y murió repentinamente en el año 2008. Los molinos de cereales de Salzburgo eran su pasión. Los molinos de grano de Salzburgo fueron la obra de su vida.
Un pedazo de calidad de vida
Le debía su amor por la buena comida a su madre, una excelente cocinera, y a su padre, inventor técnico e ingeniero mecánico, ¡que tenía curiosidad por saber cómo se hace realmente bien algo!
¿Perfeccionismo o conciencia de la salud?
Probablemente ambos. ¿De qué otra manera se puede explicar que un joven ingeniero mecánico con maestría, en una posición de liderazgo como especialista en máquinas y aparatos especiales en una empresa de renombre internacional con excelentes oportunidades laborales, decida renunciar a todo para construir molinos de primera clase?
Éxito con ideas propias
En aquella época, en los años 70, no había muchas cosas que se pudieran copiar o replicar si se quería desarrollar un molino doméstico: había que tener ideas propias, probarlas, idearlas uno mismo y mejorarlas. Que lo consiguió plenamente lo demuestra, sobre todo, el «Molino de grano de Salzburgo», el primer modelo de molino desarrollado por él, que aún hoy -décadas después- sigue siendo considerado el Mercedes entre los molinos de grano.
La piedra de molino de granito natural – La coronación de los molinos de cereales de Salzburgo
Moler según viejas tradiciones de molienda en combinación con la última tecnología era su objetivo. Fueron necesarios 5 años de exhaustiva investigación hasta que una piedra de molino cultivada de forma natural (un tipo de granito muy especial) pudo satisfacerle con los mejores resultados de molienda. Como resultado, muchos avances en la construcción de molinos se debieron a sus estudios técnicos y a su sentido común.
Todo lo bueno tiene que ser lindo también
Pero Johann Thurner no sólo le dio gran importancia al desarrollo y la tecnología, también prestó gran atención al diseño. Como alma que no sólo estaba apegada a la naturaleza, sino también como hombre moderno que estaba totalmente comprometido con la vida (marinero entusiasta, alpinista, amante de la música, etc.), una apariencia atractiva era un criterio importante para él.
Su opinión era: Un molino debe generar felicidad y ser una joya en la cocina. ¡Los molinos de cereales deben ser montados de tal manera que estén inmediatamente disponibles para cada puñado de harina!
Siguiendo la tendencia de la época,pero no a costa de la calidad
Con sus modelos de molinos «Maxi» y «Carina» cumplió en gran medida los requisitos actuales. Con el menor requerimiento de espacio y la más moderna tecnología, también satisfizo el deseo de obtener el mejor precio posible. Sin embargo, el técnico nato no podía y no quería prescindir de calidad, que naturalmente tiene su precio.
Su lema era: ¡no hacer concesiones a costa de la calidad!
Clientes satisfechos desde hace más de 30 años
El hecho de que las empresas, las familias y las explotaciones agrícolas molan con los molinos de Salzburgo adquiridos hace más de 30 años fue para él una prueba en vida de que había tomado la decisión correcta, y lo sigue siendo para nosotros hoy.
Con convicción – con corazón y mente….
De joven tuvo un sueño: «¡Seré un molinero y mis molinos molerán largo, fino y suave!».
Su sueño se ha hecho realidad: ¡Johann vive con sus molinos!
Desde su muerte, su hermana Christine Thurner continúa fabricando los molinos de cereales de Salzburgo en su nombre.
Aquí puede ver los molinos de grano de Salzburgo en todo su esplendor >>
Así fue: Cómo surgieron los molinos de grano de Salzburgo
